Teniendo en cuenta los parámetros legales, se debe prestar atención a otros aspectos a la hora de construir una piscina.
Orientación de la piscina
La piscina tendrá que estar siempre orientada en el lugar donde exista más irradiación solar a lo largo del año, incluso en verano. Siempre es agradable una exposición solar tras el baño. Aunque deberás tener en cuenta que, si instalamos trampolines, hay que evitar que nos deslumbre el sol en el momento del salto.
La mejor orientación para instalar la piscina es construirla cara al sur o al oeste.
Equipamiento de la piscina
El interior del vaso de la piscina puede contener diversos elementos como skimmers, sumideros, boquillas, chorros de agua, toma de limpiafondos e incluso focos subacuáticos. Por otro lado, en el exterior del vaso, podemos encontrar cascadas, barandillas, escalerillas y toboganes.
Cuando se construye el vaso, debemos instalar las conducciones destinadas a los elementos empotrados que hemos mencionado anteriormente. Y, a continuación, colocaremos el revestimiento del fondo y las paredes y los brocales.
Es recomendable que, a una distancia de 3 a 15 metros, se coloque el local técnico, ya sea de obra o prefabricado, en un espacio cerrado y aireado que aloje los equipos de filtración de agua. Es decir, los filtros, bombas o válvulas, el armario eléctrico y de control y los dosificadores automáticos de los productos químicos.
Forma de la piscina y tratamiento del agua
La construcción de la piscina se suele realizar en formas geométricas como piscinas rectangulares, cuadradas, circulares, ovaladas e incluso en forma de L. Este tipo de piscinas tiene una baja complejidad constructiva y se adaptan mejor a los procesos de prefabricación.
Por otro lado, las piscinas de forma libre tienen multitud de posibilidades de construcción, pero tendrán más problemas de diseño y adaptación. Se pueden realizar formas libres en piscinas de hormigón y en piscinas prefabricadas o de paneles.
Por otro lado, el tratamiento físico y químico del agua tiene como objetivo reducir el riesgo sanitario de emplear el agua. Es decir, con el tratamiento químico se mejora la transparencia del agua, se destruyen los microorganismos y se evita la presencia de algas.
El agua de la piscina debe estar desinfectada y ser desinfectante. Con el tratamiento físico, a través de los filtros, se eliminan las partículas sólidas suspendidas en el agua.
El terreno en el que se instala la piscina
El terreno donde se realizará la construcción de la piscina necesita un estudio previo y un análisis realizado por profesionales, porque debe estar bien asentada en un terreno consolidado y firme. Si el terreno es rocoso, la fase de excavación será mucho más compleja e incrementará tanto el presupuesto como el tiempo de instalación.
Además, se deben evitar también los terrenos húmedos o irrigados, porque pueden provocar que la tierra se mueva. Para que la piscina repose sobre un terreno horizontal, será necsario construir muros de contención a su alrededor.
Por otro lado, la piscina se deberá instalar en una zona protegida del viento, porque éste favorece la evaporación del agua y desciende su temperatura. Para poder evitar este problema, planta vegetación compacta o construye muros de contención. El circuito hidráulico, los skimmers y local técnico deberán instalarse también en la dirección opuesta al viento.
Como ves, estos factores son fundamentales a la hora de construir una vivienda. No dudes en contactar con nosotros si todavía tienes alguna cuestión por resolver. En Cuvec te proporcionaremos toda la información necesaria sobre la construcción, mantenimiento y limpieza de piscinas.